jueves, 12 de julio de 2012


Luego de realizar las diferentes lecturas dadas por la cátedra y ver el video, cabe pensar en el alcance de  la comunicación en referencia a la educación y de qué forma ambos repercuten  en la cultura masiva.
Con la aparición y el desarrollo  de las tecnologías electrónicas la sociedad asumió las modalidades de la comunicación masiva, que invade nuestro pensar e influencia nuestras percepciones de la realidad.
Los mensajes que reproducen los medios son parte de esta  cultura masiva, (lo que comprende  los intercambios de producción industrial de bienes culturales), y es evidente  que influyen decisivamente sobre los comportamientos sociales. Marta,  María Cristina esclarece  la relación que se establece entre el pueblo, como masa que recibe la información y el emisor. Manifiesta que dicha relación se basa en un acuerdo o contrato tácito por el cual ambos integrantes reciben o dan algo a cambio naturalmente, sin ningún tipo de dominación. Ambos se atraen y se necesitan. Esta relación explica el éxito del populismo político y comunicacional que ha tenido la habilidad de comprender esta necesidad de clases opuestas y que ha capitalizado  la noción de que la acción hegemónica genera una aceptación por parte del receptor.
 La nueva modalidad de la cultura masiva pone el énfasis  fundamental en la importancia de los medios de comunicación, ya que da por sentado, que lo que no pasa por ellos,  parece no existir. En este sentido, los medios se han convertido en legitimadores básicos de hechos e ideas; debido a que determinan comportamientos, hábitos sociales y  modos de relacionarse con los otros, fundados en la lógica del medio.
En lo que se refiere a Jorge Huergo, con su propuesta de entender  la comunicación y  los medios de comunicación como una producción social y a la educación como un  proceso de formación de sujetos que  interpretan y observan el mundo que los rodea, coincido plenamente desde mi experiencia en el aula y la posibilidad que esa interacción con los jóvenes me provee diariamente.
Es notoria la influencia que los adolescentes reciben de los medios constantemente y la forma en que todos ellos se expresan, se visten y actúan. Frecuentemente las respuestas parecen duplicadas y es responsabilidad de la educación, como proceso de formación de sujetos, la que debe trabajar los conceptos del pensamiento individual, instruyéndolos en la formación del espíritu crítico , evaluación de contenidos, certificación de datos y profundización del pensamiento, lo que resultará en individuos con opiniones propias.
 Para concretar este objetivo, que debería ser el más importante en educación, es crucial cuestionarse todos y cada uno de los aspectos referidos a la acción de la educación, para limitar la influencia irrestricta de los medios sobre nuestros educandos. Por lo tanto, esta es una cuestión abierta en la que todos y cada uno de nosotros desde nuestros lugares, deberíamos preguntarnos al respecto, a fin de evolucionar y adaptarnos a las condiciones cambiantes y a guiar y estimular a los jóvenes a formar sus propias opiniones y consecuentemente tomar las decisiones correctas.
                                                                                                                                                             Luz María Biasca

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