Consumo y cultura masiva
Quisiera
comenzar este hipertexto de bitácora, introduciendo una pregunta que deviene
del texto que realiza María Cristina
Mata “Nociones para pensar la
comunicación y la cultura masiva” y, acerca de la cual, hemos intervenido
con la recepción mediática juvenil:
¿Qué nos dice el consumo acerca de los individuos, como sujetos modelados por la cultura masiva?
En dicho texto se atraviesa el tema de cómo la
cultura y la comunicación masiva son ejecutores de una producción simbólica,
las que son sostenidos por los sectores económicos de poder, quienes apropiados
de los medios de producción y circulación de bienes culturales, crean como
necesario y deseable sus productos o valores que ofrecen, y para los que necesitan un pueblo que reciba y
afiance dichas hegemonías como legítimas. Los mensajes enviados a través de los
productos son parte de la cultura masiva, y son percibidos a través de los
medios de comunicación masivos.
Entonces aquí, cabe la meditación, sobre de que
manera esa cultura se exterioriza en los jóvenes con quienes trabajamos. Requiere
reflexionar sobre en cómo las manifestaciones de la vida social, los medios de
comunicación y las tecnologías, han influido en las experiencias de vida como
producción social de sentidos.
Jorge Huergo, en el texto “Una primera aproximación al campo de Comunicación/Educación” reconoce espacios sociales que puedan
tener prácticas educativas y comunicacionales, distintos a la escuela y medios
de comunicación tradicionales, de los cuales formamos parte y de los que
incorporamos modalidades y prácticas cuando actuamos e interpretamos el mundo
que nos rodea. Lo que significa intervenir desde el reconocimiento del mundo
cultural de los sujetos a los cuales se desea formar.
Paulo Freire habla del universo vocabular, y cito un
link de un artículo de Jorge Huergo, en cuanto refiere a “El reconocimiento del “universo vocabular” y la prealimentación de las
acciones estratégicas”
Me impacta la siguiente imagen: la de un bebé, el cual ya nace
con tatuajes o sellos afines a la cultura y comunicación masiva de determinado
contexto-momento histórico. En la misma
podemos reconocer a los grupos de poder hegemónicos mediante sus productos, logos,
identificaciones, valores que desean transmitir, y los que necesitan ser reconocidos como ciertos y
legítimos por la masa popular para afianzarse en las mismas.
La identidad de los jóvenes se afirma y reconoce en
los contextos de interacción y comunicación social, en y con los medios
culturales y mediáticos que consumen, que caracterizan ciertos rasgos
distintivos por los cuales se ven a sí mismo y son reconocidos como pertenecientes
a un grupo, poseyendo una serie de atributos y portando un pasado biográfico
inmodificable.
Por ello la posesión o acceso a cierto tipo de
productos implica centralmente acceder a un modo particular de experimentar el
mundo que se traduce en adscripciones y diferenciaciones identitarias.
El posteo está un poco más completo que el anterior y más claramente referido a los contenidos del módulo.
ResponderEliminarLo hablamos mejor en el final.
Saludos